Cuando hablamos de ciberseguridad, en términos prácticos estamos hablando de todas aquellas necesidades de ciberprotección que pueden necesitar las distintas organizaciones y empresas, sean públicas o privadas, así como sus clientes y usuarios. Es decir, que en cada caso son necesarios unos servicios de ciberseguridad particulares, y en la medida de lo posible estos deben ajustarse a las demandas del cliente (y no al revés).
Como ocurre con cualquier prestación de servicios, lo ideal es que los servicios de ciberseguridad puedan adaptarse a las circunstancias y necesidades específicas de cada organización, y si es posible de una manera dinámica y proactiva. Desde Ciberprotect proponemos tres niveles de servicio distintos a nuestros colaboradores y clientes para protegerse, y te los presentamos en esta entrada de nuestro blog.
Esta gama de servicios garantiza a cualquier organización una protección básica y eficiente, incluyendo todos los elementos que no pueden faltar en un plan de ciberseguridad:
En este nivel de servicio vamos más allá, incorporando medidas y recursos pensados para empresas con perfiles más “técnicos” y mayores necesidades de ciberseguridad. Lo hacemos de varias formas:
En este último y superior modelo de servicio, el ideal para quienes no quieren tener que preocuparse en absoluto por su ciberseguridad (sea cual sea su sector de actividad o la talla de su organización), a todo lo anterior se añaden servicios premium para alcanzar un nivel máximo de ciberprotección. Cabe destacar tres aspectos fundamentales:
Desde Ciberprotect nuestro objetivo es proponer soluciones integrales en ciberseguridad basadas en nuestra expertise técnica y en valores de innovación, integridad y flexibilidad. Además, procuramos siempre diseñar esas soluciones para hacerlas a la medida de nuestros socios y clientes y garantizar una protección multifacética (en lo tecnológico, en lo jurídico, en lo económico,) real y constante.